BIO CONEXION

En 2008, Juan Ignacio Gerardi se recibió de licenciado en Ciencias Políticas, y decidido a desmitificar que las oportunidades sólo se presentaban en las urbes desarrolladas, comenzó a viajar por el país. Así llegó a la meseta de Yacoraite en Jujuy, donde la conoció a Dominga, que sembraba maíz, y notó que el único propósito de los pueblos originarios era que sus cultivos sirvieran para elaborar fideos y otros alimentos para su sustento, pero que nadie lo valoraba lo que ellos producían. Así surgió la idea de crear Bioconexión, una cooperativa que acerca los cultivos ancestrales a los consumidores argentinos y así darles más valor. 

Hoy son 16 productores, donde ocho consolidados (miel, dulces orgánicos, cristales de sal marina, aceite de oliva, leña de recuperación de monte, frutas deshidratadas, orégano, nueces, harinas de trigo orgánico, y vinagres) apoyan a otros ocho pequeños productores: Dominga con sus maíces de Yacoraite, Facundo con su quinoa de La Poma, Walter y su sal de Las Salinas, Luis y su sopa de quinoa de San Salvador de Jujuy, Lourdes y sus duraznos de Cipaqui, Isabel y su hidromiel de Yala, Rolo y sus zanahorias de Ocumazo, y Amancio con sus hierbas de recolección. Los grandes cocineros y bartenders de Argentina usan sus productos – que también se comercializan en el Mercado de Belgrano – donde en 2017 abrieron su primera tienda en la Ciudad de Buenos Aires.